CONFESIONES DE UN MÉDICO HERETICO
por Robert S. Mendelsohn M.D
Publicado por Contemporary Books
ISBN Número 0-8092-4131-5
En España por Publicaciones GEA
El Dr. Robert Mendelsohn es conocido por millones de personas a través de su columna nacional en ¨The People s Doctor¨(el Dr de la gente). El era el director medico nacional del Project Head Start (proyecto buen comienzo) y miembro del Comite de Licencias Medicas del estado de Ilinois, USA. Entre los varios puestos en facultades y hospitales que ocupó se encontraban los de Profesor Asociado en la Universidad de Medicina de Illinois y Director del Hospital Michael Reese de Chicago.
El Dr. Mendelsohn, famoso en todo el mundo y protector de los pacientes fue un pionero en el movimiento hacia la verdad de la profesión médica. Aquí explica porqué los métodos de la medicina moderna son más peligrosos que las enfermedades que se suponen deben diagnosticar y tratar.
Aunque su libro ¨Confesiones de un Médico Hereje¨ fue publicado en 1979, lo que ha escrito tiene incluso mas relevancia hoy en día. El Dr. Mendelsohn escribe sobre doctores en USA pero los mismo paralelismos se pueden aplicar en muchos casos alrededor del mundo.
Esto es un extracto del libro, un capítulo, muy pertinente en estos días. La próxima vez que encuentres un Dr como Michael Fitzpatrick o un Psiquiatra de la ¨escuela Wessely¨ te sugermios que te acuerdes de este capítulo y lo pongas a buen uso.
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CONFESIONES DE UN MÉDICO HEREJE
por Robert S. Mendelsohn M.D
Capitulo 7
pg. 123-140
Los Sacerdotes del Demonio
Siempre me río cuando alguien de la Sociedad Médica Americana (AMA) o cualquier otra organización médica aseguran que los doctores no tienen ningún poder sobre la gente. Una vez he acabado de reir siempre pregunto ¿cuanta gente puede decirte que te desnudes y lo hagas inmediatamente?
Como los doctores son realmente los sacerdotes de la Iglesia de la Medicina moderna, la mayoría de la gente no les niega su influencia extra en nuestras vidas. Después de todo, ¿los doctores son honestos, dedicados, inteligentes, comprometidos,sanos, educados,capaces, ¿no? El Doctor es la roca en la que se construye la Iglesia de la Medicina, ¿no es así?
Ni por asomo. Los Doctores son solo humanos–en el peor de los casos. No puedes asumir que tu Doctor es cualquiera de todos esos adjetivos de la lista anterior porque los Doctores se convierten en deshonestos, corruptos, sin ética, enfermos, mal educados y simplemente estúpidos mas frecuentemente que en el resto de la sociedad.
Mi ejemplo favorito de como los doctores son menos inteligentes que la situación que tiene delante les exige, es un asunto de ámbito público. Como parte de su aparición ante EL Subcomité de Salud del Senado, el Senador Edward Kennedy recordaba una lesión que sufrió en su hombro mientras esquiaba cuando era joven. Su padre llamó a 4 especialistas para que examinaran al chico y recomendaran un tratamiento. 3 recomendaron operación. El consejo del 4º doctor, que no recomendó operación, fue el elegido. Tenía tantos títulos como los demás. La lesión se curó. Los colegas del senador Kennedy cuestionaron entonces al Dr. Lawrence Weed, Profesor de Medicina de la Univerisdad de Vermont y creador de un sistema de registros de pacientes para hospitales muy popular. La respuesta del Dr. Weed fue ¨que el hombro del senador hubiera curado satisfactioramente si la operación no se hubiera hecho¨.
Cuando se pone a prueba formalmente a los doctores, los resultados son muy poco alentadores. En un test reciente que era sobre prescripción de antibióticos, la mitad de los doctores que participaron voluntariamente consiguió 68% o menor puntuación. Ya hemos visto en los capitulos anteriores lo peligroso que es dejar a un doctor que urgue en ti. Todo ese peligro no se deriva necesariamente de los riesgos inherentes del propio tratamiento. Los Doctores simplemente lo hacen mal en algunos de estos procesos. Cuando conozco a un doctor, generalmente entiendo que estoy conociendo una persona de mente estrecha, prejuiciosa, y bastante incapaz de razonar o deliberar. Pocos doctores que conozca prueban como incorrectas mis predicciones.
Tampoco se puede contar con los doctores siendo éticos. El Decano de la Universidad de Medicina de Harvard, el Dr. Robert H. Ebert y el Decano de la Universidad de Medicina de YAle, el Dr Lweis Thomas, trabajaban como consultores en la Corporación Squibb al mismo tiempo que intentaban persuadir a la FDA (Food & Drug Administration) que quitara la prohibición de Mysteclin, una de las drogas de Squibb que mas dinero hacía. El Dr Ebert comentaba ¨dí el mejor consjo que pude. Eran mis opiniones honestas¨. Lo que se negó a comentar era la cantidad ¨modesta¨ que el Vicepresidente de la compañía Squibb, Norma R. Ritter admitió haber pagado a el y al Dr. Thomas. Mas tarde el Dr Ebert se convirtió en un director asalariado en la compañía con stocks propios por valor de 15.000$.
En 1972, el Dr. Samuel Epstein, por aquel entonces en la Univerdiad Case-Western Reserve, una de la autoridades mundiales en las causas químicas del cancer y defectos de nacimiento, dijo al Comité Selecto del Senado en Nutrición y Necesidades Humanas que ¨la Academia de Ciéncias Nacionales etá llena de conflictos de intereses¨. Explicó que los paneles que toman decisiones cruciales como la seguridad de los aditivos químicos en la comida eran dominados frecuentemente por amigos o directores asociados a los intereses que supuestamente iban a ser regulados. ¨En este País, puedes comprar los datos que necesites para apoyar tu caso¨, comentó.
El fraude en la investigación científica es muy común, lo suficiente como mantenerlo alejado de las portadas. La FDA ha descubierto cosas tan buenas como sobre dosis o infra dosis de pacientes, invención de los registros y deshacerse de las drogas cuando investigaban pruebas experimentales de las mismas. Desde luego, en estas instancias, los doctores que trabajan para las compañías farmacéuticas tienen como meta producir resultados que convenzan a la FDA para que apruebe sus drogas. Algunas veces, con la competición por dinero en becas cada vez mas fuerte, los doctores quieren resultados que mantengan las líneas de fondos abiertas. Como todos los ¨viejos colegas¨ investigadores están en el mismo barco, parece haber una gran tolerancia con los experimentos chapuceros, resultados incomfirmables y descuido al interpretar los datos.
El Dr. Ernest Borek, un microbiólogo de la Universidad de Colorado, dijo que ¨un aumento de datos falsos o datos con un cuerpo de Texto añadido , llegan hasta las revistas científicas¨. EL ganador del premio Nobel Salvadore E. Luria, un biólogo en el MIT (Massachusetts Institute of Technology) dijo ¨Conozco de al menos dos casos en los que científicos respetadísimos tuvieron que retractarse de sus conclusiones hechas en sus laboratorios porque descubrieron que los datos habían sido manipulados por uno de sus colaboradores¨.
Otro ejemplo, ya clásico de fraude, ocurrió en el Insituto Sloane-Kettering donde el investigador Dr. Wiliam Summerlin admitió haber pintado ratas para que pareciera que habían conseguido exitosamente un transplante de piel. Un predecesor al arte de pintar animales fue Paul Kammerer, un genetista Austríaco, que a principios del siglo 20 pintó el pie de una rana para probar la teoría Lamarckiana de transmisión de características adquiridas. Cuando fue expuesto posteriormente en el libro de Arthur Koesssler ¨El caso de la Rana comadrona¨, Kammerer se suicidó de un disparo.
El Dr. Richard W. Roberts, director de National Bureaus Standards dijo que ¨la mitad de los datos publicados por científicos en sus artículos de la revista no se podían usar porque no había evidencia que el investigador midiera con precisión lo que creía estar midiendo o no había evidencia que posibles fuentes de errores fueran eliminadas o tomadas en consideración. Ya que es casi imposible para el lector medio de magacines científicos determinar que mitad del artículo se puede usar y que mitad no, me pregunto si las revistas médicas sirven como avenidas de la comunicación o de la confusión.
Una manera de juzgar la validez de un atículo científico es examinar el pie de página para ver la fuente de los fondos. Los registros de compañías farmacéuticas en lo que concierne a sus investigaciones no son especialmente brillantes como para inspirar confianza. Hemos visto como los doctores no están por encima de decorar e incluso inventarse resultados cuando las apuestas eran lo suficientemente fuertes. El Dr. leroy Wolins, un Psicólogo de la Universidad de Iowa, tuvo un estudiante que escribió a 37 autores de artículos científicos preguntando por los datos orginales en los que basaban sus conclusiones. De los 32 que respondieron, 21 dijeron que sus datos se habían perdido o se habían destruído accidentalmente. El Dr. Wolins analizó 7 grupos de datos que fueron recibidos y encontró errores en 3 de ellos lo suficientemente importantes como para invalidarlos como hecho científico.
Desde luego, el fraude en la investigación no es nada nuevo. Cyril Burt, el Psicólogo Británico quien se hizo famoso por sus afirmaciones que la inteligencia humana era determinada por herencia, fue expuesto como un fraude por Leon Kamin, un psicólogo de Princeton. Parece ser que los ¨ayudantes¨de Burt ¡ni siquiera existían! Hay evidencia que Gregor Mendel, el padre de la teoría genetica hereditaria, habría manipulado los resultados de sus cruces de guisantes para que se ajustaran perfectamente a su teoría. Las conclusiones de Mendel eran conrrectas pero el análisis estadístico de sus datos publicados muestra
la probabilidad de 10,000 a 1 a que se hubieran conseguido esos datos con los experimentos que Mendel había hecho.
El comportamiento inmoral no se limita al negocio de la Medicina. Un doctor cuyo nombre es sinónimo al desarrollo de un proceso quirúrgico importante fue condenado por evasión de impuestos omitiendo la suma de 250,000$ desde 1964-68 en sus declaraciones de hacienda. Hace unos años, un miembro de la AMA (American Medical Association) fue culpado y sentenciado a 18 meses de prisión por haber participado en una conspiración de malversación de fondos por valor de 1,8 Millones de dolares. De acuerdo al FBI, el y sus compañeros, habían conspirado para ¨obtener préstamos indirectos por su propio interés..pagando fondos bancarios con cheques que no tenían fondo como garantía….y defraudando al Gobierno…¨.
Recuerda que estos líos ocurren al mas alto nivel de la profesión de medicina. Si este tipo de fraude, mentira y robo ocurre entre los cardenales y pontífices de la medicina moderna en Yale, Harvard, La Academia Nacional de las Ciencias y la AMA, ¡imagina lo que está ocurriendo entre los pastores de otras escuelas de medicna y sociedades médicas!
Quizás la característica mas llamativa de la profesión de aquellos que se supone que deben proveer Salud es que los doctores, como grupo, parecen estar mas enfermos que el resto de la sociedad. Estimaciones conservadoras indican que hay 17,000 médicos con probelmas psiquiátricos en los USA, uno de cada 20, el número de alcólicos es superior a 30,000 y 3,500 son adictos a narcóticos o el 1%. Un estudio que duró 30 ños comparando los doctores con profesionales del mismo nivel socio económico y de estatus intelectual mostró que la mitad de los doctores estaban divorciados o eran infelices en su matrimonio, mas de la tercera parte usaba drogas como amfetaminas, barbituricos y otros narcóticos y otra tercera parte sufría problemas emocinonales lo suficientemente severos como para reuqerir al menos 10 visitas al psiquiatra. El grupo control de los que no eran doctores no estaba tan mal.
Los doctores tienen entre 30 y 100 veces más probabilidades de abusar de los narcóticos que la gente común, dependiendo de la droga en particular. En una reunión semianual de la Asociación Médica Americana (AMA) de 1972, encuestas citadas mostraron que casi el 2% de los doctores practicando en Oregón y Arizona habían sido disciplinados por las autoridades estatales de licencias por abuso de drogas. Un porcentaje todavía más grande se metió en problemas por exceso de alcohol incluso la AMA admite que entre un 1 y un 1,5% de los doctores en USA abusan de drogas. Varias reformas y medidas de rehabilitación durante los años no han podido cambiar estos porcentajes. Nota que estos números representan sólo los casos identificados. En Illinois, por ejemplo, el Dr. James West miembro del panel de la Sociedad Médica de Illinois para doctores incapacitados, informó que el 4% y no el 2% de los doctores eran adictos a los narcóticos. Estimó que el 11,5% eran alcohólicos (1 de cada 9).
Los suicidios entre los doctores son mayores que los accidentes de coche, de avión, ahogos y homicidios combinados. La media de suicidio de los doctores es el doble de la media de todos los americanos blancos. Cada año sobre unos 100 doctores se suicidan, un número igual al de una clase de graduación de una escuela médica media. Además la media de suicidio entre las doctoras es claramente cuatro veces más alta que las de mujeres de otra profesión por encima de los 25 años. Las excusas de la profesión médica citan varias razones para tan elevado número de enfermos entre los doctores: ‘Las drogas son muy fáciles de conseguir’; ‘Trabajan muchas horas bajo un gran estrés’; ‘Sus raíces y perfil psicológico los predispone a estirar sus poderes hasta el límite’; ‘Los pacientes y la comunidad les hacen excesivas demandas’.
Desde luego, aceptes o no estas razones, no explican el hecho de que los doctores son un grupo de gente muy enferma.
De todas formas, yo prefiero buscar otras razones. El fraude y la corrupción en el proceso de investigación no sorprende a nadie que haya sido testigo hasta dónde llegan las compañías farmacéuticas para cambiar la forma de pensar de los doctores. Cenas gratis, cockteles, convenciones y las becas de investigación son todavía explicaciones superficiales. Cuando examinas el clima moral y psicológica de la medicina moderna empiezas a acercarte a una comprensión de por qué los doctores son tan insalubres.
La política médica, por ejemplo, es un juego de poder ‘cortagargantas’ del tipo más primitivo. Yo prefiero la política de políticos porque allí está el arte de lo posible que significa que debes comprometerte. La política médica es el arte del poder absoluto, no hay compromiso, vas directo a la yugular antes de que destrocen la tuya. No hay espacio para el compromiso porque las iglesias nunca comprometen su ley canónica. En lugar de tener un proceso abierto en el que la gente con intereses distintos se juntan e intentan sacar lo mejor de la situación, en la política médica hay una estructura de poder rígida y autoritaria que sólo puede moverse a través de juegos de poder tipo ‘el ganador se lo lleva todo’. Históricamente los doctores que se han atrevido a cambiar las cosas significativamente han sido arrinconados y han tenido que sacrificar sus carreras para seguir manteniendo sus ideas. Muy pocos doctores están dispuesto a hacer cualquiera de estas dos.
Otra razón por la que los doctores tienen menos probabilidades de comprometerse es porque tienden a restringir sus amistades a otros doctores. Las amistades cercanas entre doctores y no doctores no son tan frecuentes como en otras profesiones, consecuentemente los doctores raramente tienen que defender sus opiniones entre gente que no comparte su bagaje y que podrían ofrecer un punto de vista diferente. Los doctores pueden desarrollar su filosofía con relativa privacidad e interactuar a intervalos en la escena pública para promocionar estas ideas y retirarse rápidamente a la seguridad de otros doctores que apoyan las opiniones del grupo. Este lujo no está disponible a otros en posiciones de influencia de la vida pública.
Desde luego, los doctores ven a sus pacientes pero no los ven como personas, la relación paciente doctor es como la que hay entre el dueño y un esclavo ya que el doctor depende de la sumisión completa del paciente. En este tipo de ambiente las ideas casi no se pueden intercambiar con la esperanza de que el doctor va a ser afectado.
La indiferencia profesional se resume en que el doctor quita de la relación cualquier valor o influencia humana. Los doctores no se juntan con los no doctores en otra forma que no sea la profesional.
Además como las ambiciones de los doctores para proyectarse en las clases altas ahí es donde están sus simpatías. Los doctores se identifican con la clase alta e incluso más allá. Se ven a sí mismo como la verdadera élite social. El estilo de vida y el comportamiento profesional de los doctores anima a pensar autocráticamente. Así que su política conservadora y económica son predecibles. La mayoría de los doctores son blancos, masculinos y ricos. Una posición muy difícil para relacionarse efectivamente con mujeres no blancas y pobres. Incluso los doctores que vienen de estos grupos raramente vuelven a servirlos y estar con ellos. Estos también se convierten en blancos, masculinos y ricos de manera práctica y tratan a sus semejantes con el desdén paternalístico de otros doctores.
Continuará….